«Todos los obreros que estaban alrededor se me quedan mirando atónitos y yo les digo: sois unos gilipollas de verdad sois unos esclavos. Hay que liarse a hostias con estos guardias con esta basura fascista. Quién coño se han creído que son estos parásitos escupámosles en la cara hagamos lo que nos venga en gana esto parece la mili joder. Fuera tenemos que pagar si vamos a un bar si cogemos el tranvía para la pensión todo lo tenemos que pagar. Y encima dentro nos quieren mandar. Por cuatro duros que no te alcanzan para nada por un trabajo que nos destruye. Ya está bien. Es que nos estamos volviendo locos. Esta es una vida de mierda hasta los presos que están en el talego son más libres. Nosotros aquí encadenados a estas máquinas de mierda no nos podemos mover nunca todo cronometrado. Sólo falta el capataz con el látigo.»
Por María Pachón
Después de haber estado día tras día que suman años recitando el poema de Nach y Pablo Guerrero, Tiempo, dame más tiempo, ahora que lo tenemos nos observamos de cuando en cuando suspirando por volver a perderlo. Nanni Balestrini (Milán, 1935), guionista de cine y teatro, artista plástico, historiador, novelista, dramaturgo, militante político y, ante todo, poeta, estaba en lo cierto: Lo queremos todo.
Carente de comas -«toda mi generación quería hacer algo que reflejase el tiempo presente y por eso experimentábamos con nuevas formas de lenguaje y comunicación»-, esta novela se lee ágilmente no solo por su ritmo, sino sobre todo por su historia: la de un joven italiano del sur que viaja al norte del país en busca de un trabajo digno. Resulta familiar, ¿verdad? Y sí: efectivamente, el final del muchacho será salir de la situación de paro y podredumbre que se da en el ámbito rural del sur de Europa para entrar en la situación de explotación y precariedad que se da en las grandes ciudades del norte. En un clima de huelgas salvajes, el protagonista de esta excepcional novela política procurará resolver las situaciones de constante acoso laboral mediante el desarrollo de la conciencia crítica y la acción colectiva.
¡Lo queremos todo! Porque no queremos pasar la mitad de nuestra vida en la fábrica. Porque el trabajo es nocivo. Porque queremos tener más tiempo para organizarnos políticamente. Porque queremos llevar la lucha contra el patrón. Porque queremos quedarnos en casa sin perder el salario cuando no podemos trabajar. […] Porque somos nosotros los proletarios del sur nosotros los obreros masa esta enorme masa de obreros los ciento cincuenta mil trabajadores de la Fiat los que hemos construido el desarrollo del capital y de su Estado. Porque somos nosotros los que hemos creado toda esta riqueza y de la que no nos dejan más que la migajas. Porque hemos creado toda esta riqueza dejándonos la vida en el trabajo o muriéndonos de hambre en el sur. Pero ahora que somos la gran mayoría del proletariado ya no tenemos ganas de trabajar y de dejarnos la vida en el progreso del capital y de su Estado. Estamos hartos de mantener a todos estos cerdos.
Compuesta por una decena de novelas, una veintena de poemarios, varios ensayos y múltiples producciones visuales relacionadas con el collage, la obra de Nanni Balestrini (vinculada en sus comienzos al movimiento literario de la Neovanguardia y posteriormente al Gruppo 63 de Edoardo Sanguineti, Alberto Arbasino, Renato Barilli y Umberto Eco, entre otros), se caracteriza por la experimentación literaria y el compromiso político desde sus comienzos. A consecuencia de ello, en 1979 Balestrini fue acusado de ser inspirador intelectual de la organización terrorista revolucionaria Brigadas Rojas, y de participar en 19 asesinatos políticos, incluyendo el del presidente italiano Aldo Moro. Exiliado en Francia, el autor no recibió la noticia de su absolución definitiva hasta 1984.
La literatura de Nanni Balestrini, sin embargo, continúa relegada, marginada, silenciada. Lo queremos todo (1971), Blackout (1980), Los invisibles (1987) o La violencia ilustrada (1976) siguen resultando incómodas para el poder: «Vivimos en una sociedad especialmente represiva, aunque sea de una manera mucho más sutil que antes», comentaba el autor en una entrevista para El País en 2007. En España, Lo queremos todo fue publicada en 2006 por Traficantes de Sueños. Hoy, gracias a la labor de este dispositivo político, podemos descargarla y leerla libremente. Mejor hacerlo cuanto antes. Cuando regresemos a la fábrica quizás olvidaremos que lo queremos todo porque solo querremos tiempo.
Descarga Lo queremos todo en Traficantes de Sueños. Una lectura útil en tiempos pasados, presentes y venideros.
También puedes apreciar el tiempo libre escuchando, en la poesía de Nach con Pablo Guerrero, tus propias plegarias de hace solo unas semanas: Tiempo, dame tiempo.